Reflexiones de lunes por la noche:

• Vivir sólo por un sueño es la cosa más estúpida a la que se puede apuntar teniendo en cuenta que somos capaces de tener uno distinto cada día. La idea central de focalizarse en una sola cosa es que otros puedan vivir de explotar tu talento por medio de un pacto sin que uno sea capaz de evitarlo o incluso comprenderlo. La mente debe nutrirse horizontalmente para poder comprender mejor lo que nos rodea y no sólo lo que tenemos delante, no por una aspiración intelectual desmedida sino para aprender a convivir y a adaptarnos a lo que es distinto de nosotros mismos sin desprecio o, lo que es peor, indiferencia.
• Del mismo modo debe intentar vivirse la vida en forma horizontal, explorando distintas vetas, no quedándose siempre en la idea de una verticalidad, de lo contrario se queda atrapado uno en un grupo de pertenencia, sin quizás nunca descubrir, que el ser humano puede formar parte de varios grupos de pertenencia diversos al mismo tiempo y que eso es lo que hace a una vida plena y no como, se arrepiente Borges, de haber vivido toda la vida en una biblioteca.
• La religión es una moneda que en su otra cara resulta un concepto que utiliza el poder para dar falsa esperanza en un contexto de límites innecesarios, por lo general injustos y en favor de una minoría.
• No vale la pena morir por un ideal, sólo vale la pena hacerlo para tener derecho a tener siempre ideas propias.
• El sentido común se aprende en el jardín de infantes, cuando el adulto es capaz de ordenar y traer justicia en un contexto de caos y desorden y se va corrompiendo de a poco durante el resto de nuestras vidas a medida que nos vamos reconociendo como adultos.
• Cualquier mano política, ya sea la derecha o la izquierda, son sistemas no viables cuando en lugar de estar abiertas están cerradas.
• La tecnología es un avance científico sin precedentes que ha sido liberada a la sociedad con el solo fin de poder brindarle una zona de confort tan viable al hombre que le quite el deseo de ser libre de ella y pase a temer pensar por fuera de ella..
• El bienestar personal como comienzo de un camino hacia el bienestar general es una filosofía muy de moda que en su otra cara ofusca la posibilidad del surgimiento espontáneo del bienestar grupal por fuera del sistema en el que nos dicen que vivimos. Quien dice necesitar estar bien consigo mismo antes que con los demás, desecha la idea de pertenecer a una especie, de merecer ayuda del otro, olvida el rol del adulto en el jardín de infantes y abraza su pena y sus males aunque hayan sido otros los culpables de llevarlo a este estado de mal para guiarlo o guiarla por un camino de resentimiento y desapego de los demás en el que aprende autosuficiencia e indiferencia a la desgracia ajena. Es el camino de una sociedad que deja de cuidar a los inválidos, los pobres, los enfermos, los niños y los ancianos.
• El ser humano primero devora y mucho tiempo después aprende a dar de comer cuando finalmente tiene su propia familia. Una sociedad que no enseña a dar de comer desde el principio a sus infantes, es una sociedad barbárica.